jueves, 25 de septiembre de 2008

Some good old country...

Hoy os a poner un vídeo de hace unos años que tenía por ahí, de cuando cantaba country (aunque el rock corre por mis venas), en Universal Studios Portaventura.



¡Espero que os guste!

miércoles, 24 de septiembre de 2008

The hardest part

El otro día me enviaron un vídeo que me gustó mucho, de un camionero americano que aparte de pasarse el día al volante, a veces se marca cortos como éste. ¿Qué es lo peor de vivir al volante?.



Conducir como modo de vida es una experiencia maravillosa, pero conlleva éste tipo de cosas como parte negativa. Dedicado a los que están ahí fuera en éstas condiciones, héroes desconocidos de nuestro tiempo. ¡Conducid con cuidado!

martes, 23 de septiembre de 2008

Unrelated old pics

!Hola a todos!

He recuperado algunas fotos que tenía por ahí perdidas para darle un poquito de color al blog. Lástima no poder recuperar (de momento), otras tantas que se quedaron en el disco duro del portatil antiguo, de los viajes a Nebraska, Missouri... pero ya me ocuparé de eso.

Lake Huron, near Kincardine (ON)

Fanway Park Boston Red Sox Stadium, probably not the best view...

A couple of pics of the Zakim Bunker Bridge in Boston


This it was taken in Germany... and yep!, it's not mine.

French-French (two times means European, just one means from Quebec, hahaha...) Kenworth truck (somewhere near Reims, France), with the actual gas prices?, poor guy!

How many times I took that ferry... ?

Awesome brand "new" cars in Egypt, worst traffic ever!

A couple of toys of the owner of this B&B in Grand Bend, ON. Actually he's the only one who can drive this yellow devil, if you push too hard the gas, the 1.000 hp will put the nose of the car flying up like a rocket, awesome!. Great guy from Netherlands.


Pennsylvania or New Jersey, heading to NY

Nice weather crossing the George Washington Bridge

Please, don't let them get out of there...

Staten Island

Some beautiful skies...

Fort Erie(ON)/Buffalo(NY) border


Route 66, near Springfield, IL


Definitely, the worst day of the last winter...

I thought it was better from inside, arrrrggghhh...!!

Sunset over 1.000 Thousand Islands, arriving to the border.

Cool!

Esto, ésto, ésto... ¡ésto es todo amigos!

viernes, 19 de septiembre de 2008

Chinook wind

No me gusta adelantar acontecimientos porque las cosas cambian inesperadamente (y más últimamente), pero voy a intentar dar unas pinceladas de lo que parece van a ser mis próximos pasos para éste otoño que viene.

Tanto parón vacacional (me he pegado dos mesecitos haciendo fotosíntesis), me pone de los nervios, así que a pesar de disfrutar de la playa (al de una semana ya no hay quien lo aguante), nuestras delicias culinarias y demás, me he puesto manos a la obra.
He barajado todas las posibilidades a corto/medio plazo, he mirado destinos dispares, varios trabajos y oportunidades estrambóticas, y al final... todo apunta a que me vuelvo al fresco invernal de Canadá.

Como soy tan listo, después de pasar uno de los peores inviernos de los últimos 20 años en Ontario, me vengo a España en verano, y ahora que el amigo invierno está esperando a la vuelta de la esquina con la escopeta cargada, cojo y me vuelvo para allá. ¡Que me va la marcha, vamos!.

Bueno, todavía falta por limar algunos flecos, y hasta que no me vea allí instalado, no lo doy por hecho, pero bueno, así está el tema hoy por hoy.

Inga encontró trabajo en un hotel nada más llegar y está agusto, pero obviamente es un trabajo de temporada que en los meses de invierno desaparece, así que por su parte, nada en perspectiva hasta al menos el próximo Abril por éstas latitudes, y yo, a pesar de haber buscado con ahínco algo que satisfaciera mis ganas por estar entretenido, no he conseguido grandes resultados, que a sabiendas de la situación económica y laboral, tampoco me ha sorprendido demasiado. Me llegaron a rechazar en una entrevista por excesiva movilidad laboral en el pasado, les daba poca seguridad de continuidad, y eso en los tiempos que corren, y tratándose de una ETT, me parece bastante irónico...

Así que en vista de la situación, tras restablecer contacto con una empresa con la que venía hablando desde hace muchos meses, y con perspectiva de mejorar bastante las condiciones que tenía en Ontario, pues ahora a descubrir Alberta, con sus impresionantes rocosas, sus vaqueros, y sus vientos Chinook, que convierten en primavera algunos días del crudo invierno canadiense.


Obviamente, se que volveré a echar de menos algunas cosas, que todo en ésta vida no se puede tener, pero siendo realista, creo que tengo más opciones de estar agusto allí que en Tarragona, y mi conocimiento de la vida allí es mucho más amplio que cuando me fuí a Kitchener.

Y sinceramente, para qué nos vamos a engañar, soy un maldito adicto de la conducción. Todo el que se haya pasado largas temporadas conduciendo, conoce la droga que supone estar al volante. Después de éstos años, hacer un viaje de menos de 2.000 kms. es como ir a por el pan (sí, de vez en cuando sale el bilbaíno que llevo dentro).
Me siento músico por encima de todo, he hecho trabajos variaditos (camarero, empleos varios de labor administrativa, asistente de estudio de diseño, cantante, tuve mi propio negocio...) pero nada engancha más extralaboralmente que vivir en ruta.

Sí, es un trabajo duro, que conlleva días de astío esperando cargas o soportando a determinadas empresas, problemas burocráticos en aduanas, el peligro del tráfico, condiciones climatológicas extremas, no se duerme como en casa, la comida en carretera...pero en cuanto lo dejas un mes, las ganas de estar de nuevo ahí fuera, cada día despertando en un lugar distinto, y disfrutando de momentos que te pierdes con otros trabajos, como esos amaneceres inolvidables con el brillo de la nieve en el asfalto, la no rutina, o descubrir lugares a los que no te plantearías jamás ir de vacaciones (Roger, añade algo que me haya dejado...), hacen que no me queden muchas dudas. Todo es probar, y si no... "Siempre nos quedará París (o Tarragona)".

Es difícil tomar una decisión así, cuando parece que repites intento, pero como decía Randy Pausch, los muros están en el camino de cada uno, para evitar que alcanzen sus sueños los que no los desean realmente, son una prueba para la superación personal, y volver a Canadá, para conseguir la meta de estar allí con tranquilidad, se convierte en un motivo de esos que hace que te sientas como Rocky subiendo las escaleras del Museo de Arte de Filadelfia.

Así que en eso estoy ahora mismo, buscando algún restaurante español "real" que no sirva burritos y enchiladas por allí para cuando me entre la morriña, y haciendo los preparativos para la incursión inicial que será en unas pocas semanas, ya os iré informando.

Un abrazo a tod@s, y hace mucho que nos os lo recuerdo... ¡portaos fatal y pasádlo bien!

P.D.: Para todos los que me escriben preguntando sobre cómo irse para allí, condiciones,etc...dos cosillas fundamentales. INGLES, INGLES, INGLES... y liberarse de cargas en España.
Inglés con buen nivel (fluído, ver las películas en V.O. sin problemas al menos) y lo de las cargas, porque con el cambio euro/dollar, no se gana como para tener tres casas en distintos países del mundo. A partir de ahí, sí, hay trabajo, es cuestión de buscar, comparar, escoger, equivocarse, seguir, vivir, luchar y disfrutar. Para todo lo demás, Mastercard, y me mandáis un mail con lo que queráis saber.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

"Condensador de fluzo"... "¡fluceando!"

Aprovechando que hoy hace exáctamente un año de mi primer viaje a Canadá, me gustaría escribir sobre una curiosa sensación que vengo arrastrando éstos días, y que me recuerda, como algunos habréis sacado del título del post, a la película "Regreso al futuro".

Cuando estaba en Canadá, el hecho de regresar a España, era pensar en una vuelta a lo conocido, a las costumbres cotidianas, a la tranquilidad del hogar, algo así como continuar con el día siguiente después de mi partida. Como si nada hubiese pasado, como si el tiempo en tierras americanas fuese producto de mi imaginación, y simplemente retomar todo aquello con lo que estaba antes de partir. Craso error.

En un principio todo es prácticamente idéntico, mi piso, la calle, familia, vecinos, amigos, restaurantes favoritos, mismos problemas, políticos... ¡TODO!, y sin embargo, nada es igual.

Recuerdo cuando Marty McFly volvía al presente en la segunda parte de "Regreso al futuro", y se encontraba, debido a siniestros cambios en el pasado, con un presente paralelo donde nada es lo que él conocía, aún siendo la misma gente y lugares.

Pues en mi caso, nada maquiavélico ha sucedido (crisis inmobiliaria aparte), y desde el mismo viaje desde el Aeropuerto del Prat a casa, no soy capaz de encontrar el lugar que dejé a finales del año pasado. Todo está bien, todo está en su sitio, pero no es el mismo, al menos para mí.

El tiempo pasa, y las experiencias vividas cambian la propia perspectiva de cada uno, así que supongo que intentar obviar el tiempo pasado éstos meses es absurdo, pero de ahí, a casi no llegar a reconocer el camino de Barcelona a Reus...

Es como la sensación que produce el regresar a un sitio que no veías desde la niñez, ó la adolescencia, y no solamente el lugar, sino la propia percepción han cambiado de tal manera, que aquello no casa por ningún lado con el recuerdo.
Lo que no esperaba es que estando fuera algo menos de un año, el shock fuese tan grande.
Me marché del punto A al punto B, y pensaba volver al A, ó en su defecto al A+1, pero no al punto N, ¡que no he ido a ningún país nuevo!.

Si todo es tal cuál lo dejé, ¿cómo puede ser tan distinto?, paranoias personales, supongo...

La distancia y la nostalgia no son buenos compañeros, claro está. En Canadá, España me parecía la tierra donde los días corren regados con buenos vinos, al son de nuestras entrañables fiestas, y donde la despreocupación horaria, nos permite al mismo tiempo ignorar benévolamente el reloj y exprimir el día hasta altas horas de la madrugada. Toma topicazos que casi me hacían soltar la lagrimilla tonta de inmigrante, mientras me comía unas lonchas de Prosciutto (a falta de buen jamón).
Pues ahora me encuentro añorando la tranquilidad del interminable continente americano, el preciado espacio individual de cada persona, sus "sorry", sus "how you doing today?", el silencio (parece un anuncio de ausonia), en definitiva, su costumbre de procurar joder lo menos posible al vecino, que digo yo, ¿no debería ser un estándar mundial?.

Total, que cosas buenas allí, aquí, y en San Quintín del Palomar, que depende mucho de uno mismo, y que por norma, los que hemos dado el paso hace ya unos años de andar por ahí fuera, solemos ser unos inconformistas de mierda, ¡qué le vamos a hacer!.

Cuando estoy fuera, echo de menos muchísimas cosas de aquí, y sin embargo, no soy capaz de vivir más de un mes sin empezar a imaginarme en otro destino.

Próxima parada: algún lugar maravilloso al que le encontraré un montón de cosas negativas... ¡seguro!.